El pelado automático de pipas, tras su secado, se basa en su lanzamiento contra una placa metálica por medio de un flujo de aire a presión.

1. En primer lugar se secan las pipas provocando la apertura de la mayor parte de las cáscaras.
2. A continuación las semillas se lanzan en un chorro de aire a presión contra una placa metálica, separando así la pipa pelada de la cascara.
3. La separación entre pipas y cáscaras se basa en su diferencia de pesos: las cáscaras se absorven en una turbina de aire mientras que los nucleos bajan hasta una cubeta.
4. Finalmente se criban las pipas para separar las peladas de las enteras (el proceso de separación por aire a presión no es 100% efectivo).

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