martes, 6 de marzo de 2012

Antes de acabar como prisionera del pueblo romano y ver su imperio subyugado, Cleopatra decidió suicidarse dejándose morder por un áspid.

La muerte de Cleopatra

Después de poseer las mayores riquezas de Egipto, de gobernar uno de las civilizaciones más avanzadas de la época y de disfrutar una intensa vida, con tan solo 39 años de edad la emperatriz Cleopatra esperaba un trágico final como prisionera del pueblo de Roma que tanto la odiaba.

Intentando cambiar su destino, Cleopatra se entrevistó con el general Octavio. Sin embargo, la que había podido seducir a César y a Marco Antonio, no podría seducir o sugestionar de ningún modo a un hombre frío y calculador como Octavio.

La muerte de CleopatraLa muerte de Cleopatra, de Jean Andre Rixens

Así, pues, antes de acabar como esclava Cleopatra eligió morir. Para ello mandó a llamar a sus criadas Iras y Charmion para que le trajeran una cobra egipcia, el áspid, con un veneno mortal que acabaría con su vida a finales de agosto del año 30 a. C.

Aunque se desconoce el lugar de su sepultura, se sabe que Cleopatra cumplió su último deseo y que descansa al lado de su amado Marco Antonio.

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