Desde entonces la expresión «Quinta columna» se utiliza para designar, en una situación de confrontación bélica, a un sector de la población, generalmente minoritario, que mantiene supuestas lealtades hacia el bando enemigo, debido a motivos religiosos, economicos, ideológicos o étnicos.
Por ejemplo, en la Segunda Guerra Mundial donde se denominó así a los franceses que, residiendo dentro de Francia, esperaban en 1940 el triunfo de la Alemania nazi. También en Holanda y Noruega se designaban así los ciudadanos que mostraban más simpatía y lealtad hacia el Tercer Reich que hacia su propio pueblo, apoyando la invasión de sus países de origen. Del mismo modo, simpatizantes del Eje, consideraban a los partisanos que combatían clandestinamente al facismo en sus propios países como una quinta columna.
Bonus: Los disidentes entre los lagartos de la popular serie de los 80 V son también conocidos como la Quinta Columna.